Escrito por Marina Viñas, voluntaria de la casa de acogida
Este último mes vamos de celebración en celebración. Una vez terminado Dashain, es el turno de Tihar, también conocido como Depawali y Yamapanchak. Cinco días de fiesta con luces, musica y baile que empiezan con el Kaag Tihar y terminan con el Bhai Tika.
Andando por Bhipmhedi vemos que las tiendas se llenan de guirnaldas, flores, pigmentos de colores y luces que servirán para decorar todas las casas. En la calle, delante de cada casa, vemos dibujos en el suelo (como mandalas) hechos de arroz, harina seca, pigmentos de colores y pétalos de flores. Es el denominado Rangoli, la casa de acogida sagrada para los dioses y diosas hinduistas. También observamos que es el momento de pintar las fachadas y poner iluminación – como en Navidad en casa -. Y guirnaldas de flores en las puertas y ventanas. Balmandir no podía ser menos. En primer lugar, se debe limpiar a fondo las habitaciones y Krishna encargó a los niños que pintasen la glorieta. Las Didis, con la ayuda de los más pequeños, hicieron las guirnaldas con flores que se colocaron en las puertas y ventanas y pusimos luces a cada uno de los módulos de Balmandir. ¡Qué bonito, de noche, cuando Balmandir está iluminado de rojo, azul y verde! Y además con velas delante de cada puerta.
Tihar es el segundo festival más importante en Nepal después de Dashain y se hace reverencia a seres humanos, dioses y animales – como cuervos, vacas y perros-. Cada uno de los cinco días de fiesta de Tihar tiene un simbolismo específico. El primer día se denomina Kaag Tihar y está dedicado a los cuervos, que según la cultura hinduista simbolizan la tristeza y el dolor. Por la mañana se ponen dulces y platos de comida en los tejados de las casas como ofrenda a los cuervos y así los devotos pretenden ahuyentar el dolor y la muerte. El segundo día, denominado Kukur Tihar, está dedicado a los perros, animal que ocupa un lugar especial en la cultura hinduista. Se les pone la tika y guirnaldas de flores y se les ofrece comida deliciosa.
El tercer día – Gai Tihar y Laxmi Puja – además de poner ofrendas a las vacas, es el día en el que se venera a la diosa Laxmi, la diosa del bienestar. Ese día empieza Deusi (por parte de los chicos) y Bhailo (por parte de las chicas) con luces y fuegos artificiales. Grupos de chicos y chicas van de casa en casa contando la historia del festival, con una persona que narra y el resto hace de coro. A cambio, la gente de la casa les ofrece dinero, frutas y sel-rotis. El cuarto día tiene diferentes simbolismos en función del origen o casta. Mientras que algunos veneran a Goru, otros veneran a Govardhan o Mha (a uno mismo).
Y para terminar, Bhai Tika. EL último día de Tihar y el más esperado para las niñas de Balmandir. Ese día, las niñas ponen la tika a sus hermanos para asegurar-les una larga vida y agradecer-les su protección. Las niñas de la casa de acogida hicieron un ritual (con la ayuda de Didi Beli) difícil de contar con palabras. Todos los niños se sentaron en el suelo y las niñas empezaron: hicieron dos círculos delante de cada niño – uno amarillo y uno rojo – en el que pusieron pétalos de flores e incienso; esparcieron aceite y agua alrededor de todos los niños; uno a uno, les pusieron pétalos de flores en la cabeza, la tika en la frente y les ofrecieron dulces y agua mientras ellos les ofrecieron dinero. Una vez finalizado, todos comimos fruta y comida típica nepalí. Fue un momento muy especial.
PD. No os podemos mentir… tampoco perdimos la oportunidad de celebrar la Castañada comiendo unas cuantas castanyas!