Noooo! Tenemos un pequeño ataque de «urush» (un tipo de bichito) en la habitación de las niñas. Inmediatamente las niñas se cambian de habitación y desinfectamos la habitación. Aprovecharemos ahora que está vacía para pintar! Y de paso también pintaremos la habitación de los niños pequeños que hace tres años que la pintamos por última vez y ya le toca. Los niños dicen que vamos a hacer una «fiesta de la pintura»! Afortunadamente, Arun, uno de los chicos que dejó el centro hace un par de años y está estudiando segundo de bachillerato en Hetauda, vendrá los sábados por ayudarnos a pintar (había trabajado un tiempo pintando paredes del año pasado).
Y sin duda acaba siendo una fiesta de la pintura. Algunos de los chicos más grandes, como Sujan, Jay (que ahora se ha cambiado el nombre a Anish … aquí antes de clase 10 muchos de los niños tienen la costumbre de cambiarse el nombre, muy confuso…), Papu y Ashok se ponen a pintar con Arun. Y en dos días tienen las dos habitaciones limpias y bien limpias y pintadas y bien pintadas. Qué buena fila que hacen las habitaciones ahora!
La habitación de los niños pequeños está tan limpia y huele tan bien que incluso Tomi, uno de los perros del centro, se cuela en la habitación de los niños pequeños cuando no lo ve nadie para hacer una siesta (le cae una buena bronca… no lo repetirá…).
Edu, el voluntario que tenemos estos meses en Bhimphedi, ha traido de Barcelona unas fundas de cama de primera calidad. Genial! porqué los más pequeños a veces se hacen pipi, y los plásticos que poníamos antes los niños los quitaban a media noche. Así que la Beli didi tenía mucho trabajo en limpiar cada mañana. Con estas fundas que absorben el pipi todo el mundo está muy contento, los niños, y la didi.
Ahora todos los niños quieren que pintemos sus habitaciones… «bistarai, bistarai» (despacio, despacio) les decimos.