Escrito por Ester Daura, voluntaria en la casa de acojida de Bhimphedi
El huerto de Balmandir sigue su ciclo i nosotros seguimos con sus tareas. Estos últimos días hemos estado cosechando habas y muchas patatas. Se han sembrado zanahorias y ya están en marxa los planteles para la época más cálida: tomates, berenjena, pimiento…
A demás hemos querido introducir en Balmandir dos proyectos nuevos: El prmiero el Vermicompost. Siempre es importante cuidar de la tierra y asegurar que no falte ningún tipo de nutriente para que los cultivos puedan desarrollarse en buenas condiciones.
Por eso no puede faltar un buen compost en el huerto. El proyecto consiste en utilizar los restos de la cocina y del huerto y transformarlos mediante las lombrices en un compost de muy buena calidad. Para poder hacerlo hemos estado construyendo con piedras de Balmandir una estructura dividida en tres espacios por unas redes donde depositaremos los restos y esperaremos a que las lombrices hagan su tarea (digerir la materia orgánica) y el el compost vaya madurando.
Ha sido una buena faena en la que todos los niños han colaborado, ya sea recogiendo piedras del huerto o en el momento de montarlas. La estructura ya está a punto, Júlia y Ester fueron a buscar las lombrices a Kathmandú. ¡Pronto estará en marcha! La segunda novedad del huerto son las setas. Concretamente de la variedad ostra. Son un alimento con muchas propiedades beneficiosas y ricos a nivel nutricional. Así que decidimos que podría ser interesante hacer una producción de setas en nuestro huerto. Son fáciles de producir y además en interesante ver el proceso
El primer paso fue ir a buscar la paja de Arroz a Suping, un pequeño pueblo cerca de Balmandir, la cortamos en trocitos pequeños, la dejamos en remojo toda la noche para después esterilizarla al día siguiente. Después, en bolas de plástico fuimos colocando diferentes estratos de paja i de inoculo.
El inoculo lo fuimos a buscar a Kathmandú. Finalmente lo colgamos en la casa Rana, allí tienen la temperatura óptima i la oscuridad necesaria para crecer. Estuvimos contentos de ver como en pocos días el inoculo ya iba colonizando rápidamente toda la paja. Esperamos tener setes pronto El primer paso fue ir a buscar la paja de Arroz a Suping, un pequeño pueblo cerca de Balmandir, la cortamos en trocitos pequeños, la dejamos en remojo toda la noche para después esterilizarla al día siguiente.
Después, en bolsas de plástico fuimos colocando diferentes estratos de paja i de inoculo. El inoculo lo fuimos a buscar a Kathmandú. Finalmente lo colgamos en la casa Rana, allí tienen la temperatura óptima i la oscuridad necesaria para crecer. Estuvimos contentos de ver como en pocos días el inoculo ya iba colonizando rápidamente toda la paja. Esperamos tener setas pronto