Escrito por Isabel Valero, voluntaria de la casa de acogida de Bhimphedi.
Teníamos muchas ganas de que llegara este fin de semana! Y es que hemos podido poner en marcha dos proyectos que llevaban tiempo pensados! Durante dos días, algunos jóvenes del Proyecto Joven de Katmandú han visitado Balmandir para llevarlos a cabo entre todos:
BALMARKET
Muchas sois las personas que donais ropa para que llegue a los diferentes proyectos de Amics del Nepal, y así se las hacemos llegar. Esta vez hemos querido hacer un proceso diferente. Para que los niños sepan valorar todo lo que llega, hemos creado un mercado en Balmandir, donde los niños y niñas pueden adquirir algunos objetos además de la ropa de temporada, habiéndose ganado «un sueldo».
La idea del mercado es hacer que los niños, niñas y jóvenes de Balmandir se involucren más en las tareas de la casa de acogida y desarrollen nuevas aptitudes haciendo sus propios proyectos. Para ganar puntos, que posteriormente serán canjeados por Balman rupees, los niños y niñas además de participar más activamente en las tareas de la casa, pueden aprender a hacer manualidades de papel, vídeos, etc.
Para nuestra sorpresa, el día del mercado los niños decidieron hacer sus productos que pusieron a la venta y así ganar más dinero para poder comprar la ropa. El mercado fue todo un éxito, y la entrega de ropa la hicimos de manera diferente y divertida y las Didis incluso lo pudieron disfrutar ayudando a los más pequeños.
PICKLE o ACHHAR
La tradición del picante en Nepal, y en general a toda Asia, es muy común. El pickle o achhar es un conjunto de verduras previamente cortadas y secadas al sol durante 2-3 días y posteriormente mezcladas con diferentes especies que le dan ese sabor tan especial y que acompaña a cualquier plato. Entre todos, pudimos hacer suficiente pickle para poder conservar durante unos meses y poder disfrutarlo con nuestro plato preferido, el Dal Bhat.
De esta manera, los niños y niñas de Balmandir han aprendido que el esfuerzo común de un día se convierte en tener pickle, una comida que les gusta pero no tienen siempre, durante una larga temporada.
MERMELADA DE PAPAYA
Ya que nos poníamos a hacer la conserva del pickle, queríamos probar si también podríamos hacer mermelada para conservarla. Llevamos papayas y las cortamos para ponerlas con azúcar y cocinarlas hasta conseguir la textura de mermelada. Al día siguiente no nos pudimos aguantar de acabar con dos botes de mermelada junto con unos rotis a la hora del snack, ¡Qué buena!
Ha sido un fin de semana muy provechoso para aprender a conservar comida, y divertido a la hora de comprar ropa y de hacer las propias creaciones!