Lluvia, diversión y un hermano nuevo!

Escrito por Josep Mas, voluntario de la casa de acogida de Bhimphedi. 

Estamos en la época de los monzones, cuando el agua cae sin medida y refresca los sentidos, el paisaje se pinta de un verde intenso y de olor a tierra mojada, las plantas del jardín de Balmandir crecen a un ritmo vertiginoso, y el ruido de la lluvia te acompaña de día y de noche. Como es la vida en Balmandir con la llegada de las lluvias? Sigue leyendo para saber más sobre las actividades, juegos y excursiones que tenemos entre manos estos días… y sobre la llegada de un hermano nuevo!

Explosion de vegetación en los jardines de Balmandir con la llegada de las lluvias

A pesar de la lluvia también hay ratos de sol, y la actividad en Balmandir no para! Sea pintando, jugando, o haciendo figuras de papel…

¿Un ratito de sol por la mañana? Pues a pintar se ha dicho!
Lov y Ramesh durante una emocionante partida de futbol botones.
Hciendo figuras de papel el tiempo vuela, y nuestra colección de pequeñas obras de arte crece cada día!

También hay quien espera con impaciencia la apertura de la sala de ordenadores. Los cortes de electricidad son el pan de cada día, pero como dicen aquí, «ke garné!» (Qué le vamos a hacer!)

Y siempre hay un algun momento para unos paseos en carretilla por el jardín, que entusiasman tanto a pequeños como a grandes!

Pero no todo se queda en Balmandir. El contacto con la naturaleza es parte del día a día, y la lluvia no es excusa para dejar de hacer alguna excursión, aunque sea pasada por agua. De hecho, saltando de charco en charco, la caminata se hace mucho más entretenida!

Excursión al puente colgante de Bhimphedi
El pequeño Ekendra a cuestas de Kiran no se perdió las vistas, desde debajo de su capucha!

Las idas y venidas a la escuela son también más emocionantes con lluvia, todo el mundo se apaña para conseguir un paraguas o impermeable antes de salir para no terminar empapados como patos.

Kushal y Binita se lo pasaron genial el primer dia que volvían de la escuela bajo un paraguas.

Estos meses el río lleva más agua, y si baja con calma es ideal para hacer un chapuzón. A los jóvenes de Balmandir no les falta iniciativa, y los más habilidosos construyen una piscina con piedras y ramas donde poder hacer saltos, sumergirse, y quizás de paso pescar algún que otro pez despistado…

Construyendo una presa en el río

… y si el sol no acompaña a medida que avanza la tarde, no hay nada como un fuego en el suelo para reavivarse antes de volver hacia Balmandir, justo a tiempo para un buen plato de dal bhat y recuperar energías.

Fuego en tierra después del baño en el río

 

Pero como sabéis no todo son alegrías en la estación de lluvias, ya que el monzón también trae problemas a los transportes, por inundaciones, y peligro de desprendimientos. Hace aproximadamente un año que los periódicos de Nepal se hacían eco de una serie de deslizamientos que se llevaron la vida de decenas de personas en diferentes puntos de Nepal, después de un episodio de lluvias intensas.

El pequeño Bikram, nacido en las cercanías de Bhimphedi, perdió a sus padres en uno de estos fatales deslizamientos hace un año. Después de unos cuantos meses viviendo con sus abuelos, ya muy grandes y sin posibilidades de procurarle un futuro con garantías, el niño ha pasado a estar bajo la tutela de la Organización de Niños de Nepal (NCO), que lo ha asignado recientemente a la casa de acogida de Balmandir, Bhimphedi

Bikram nos cuenta con un dibujo como era su familia antes de que un deslizamiento se los llevara.

Aquí ha comenzado una nueva etapa, con casa nueva, escuela nueva, y una gran familia de acogida que tiene muy claro que quien llega a Balmandir se convierte al instante en un hermano más con quien compartirlo todo, juegos, peleas, y momentos felices.

A la nueva casa de Bikram no le falta color, gracias a la ayuda de sus nuevos hermanos y hermanas!
Las profesoras de la Bhim Aadhar Community School hacen una prueba de nivel a Bikram el primer dia de colegio.

Después de unas cuantas semanas, a Bikram se le ve feliz descubriendo los entornos de Balmandir, si puede ser, atrapando insectos, recogiendo plantas, o subido a algún lugar alto con buena vista desde donde contemplar este rincón del mundo. Quién sabe qué nuevas aventuras le esperan?

Bikram subido a un árbol con vistas a Bhimphedi

Se acaba otro día de monzón en Bhimphedi, y la música de la lluvia nos acompaña de nuevo hasta el mundo de los sueños.