Excursión de fin de curso a Hetauda

En Bhimphedi hay una escuela pública que ofrece clases de primero de primaria hasta décimo (equivalente a 4º de ESO). Y también hay una pequeña escuela comunitaria que ofrece clases de guardería hasta quinto de primaria.

Los niños y niñas de la casa de acogida los llevamos a la escuela comunitaria hasta que es posible, porque el número de alumnos por clase es menor, porque hacen más clases en inglés y sobre todo porque las clases son mucho más regulares.

Cada año, la escuela comunitaria organiza en el último trimestre una excursión para los niños de quinto, y por tanto el último trimestre que pueden estudiar en la escuela comunitaria. El día antes, todos los niños de quinto y los profesores prepararon todo lo necesario para la excursión: comprar la comida y cocinar todo lo que se puede preparar el día antes y poner el equipo de música a cargar, no hace falta nada mas.

El programa era sencillo: con el transporte reservado para la ocasión, vamos hacia Hetauda y visitamos tres lugares diferentes: primero un templo (Kusmanda Sarobar), luego otro templo/picnic (Banaskhandi) y finalmente un parque infantil (Puspalal Park). ¡Todo el mundo está muy excitado!

Por la mañana los dos niños de la casa de acogida que estudian en quinto se levantan bien temprano y se arreglan para ir a la ciudad! A las 7:40 ya están en la escuela preparados. Pero los profesores los envían de nuevo a casa, y les dicen que vuelvan una vez hayan comido dalbhat. ¡Finalmente a las 9:30 salimos hacia Hetauda!

0_excursio 0

La primera parada, Kusmanda Sarobar, es un templo muy curioso que se encuentra en medio de la laguna del río. Alrededor del templo hay 108 fuentes, con forma de cabezas de vaca. El 108 es un número propicio en el hinduismo y el budismo. Luego, nos ponen a todos una «tica» con estilo. Y todo el mundo le pide un deseo al oído de una vaca de metal. Y listos, volvemos al autobús para ir hacia la siguiente parada!

0_excursio 1

0_excursio 2

0_excursio 2b

0_excursio 2c
En la derecha Ramesh y Ashish, los dos chicos de quinto de la casa de acogida. A su lado, dos de las profesoras de la escuela comunitaria, Manisha y Ranjita. A la izquierda, yo, Daniel, coordinador de la casa de acogida.

0_excursio 4b

0_excursio 4

0_excursio 3

0_excursio 5

0_excursio 6

¡Qué fácil! ¡qué simple! Un templecito rodeado de un montón de fuentes. Un anciano poniendo un punto de color en la frente. Una figurita y todos, alumnos y profesores, ¡encantados y felices! Y los niños españoles se aburren en la Alahambra…

Pero mientras pensaba eso, la cosa se pone interesante. Para ir hacia la siguiente parada, tenemos que cruzar el río, y el puente está en obras, así que el conductor, sin dudar, ¡lo atraviesa! El agua entra por la puerta del autobús, pero no hay problema, seguimos adelante. Esto sí que ha sido emocionante, y sin planear, como las mejores cosas en Nepal.

El siguiente lugar a visitar, Banaskhandi, es un bosque donde han puesto varios templos y algunos cubiertos para hacer picnics. Y allí nos estamos 5 horas. Comiendo, bailando, cantando y haciendose fotos en los templos. Muchos otros grupos de niños y no tan niños también hacen lo mismo.

om

Y cuando digo picnic, no penséis en bocadillos de pan de molde, ¡no! Ellos hacen un fuego en el suelo para hacer el arroz, otro para preparar las verduras fritas y otro para preparar el pollo (que en muchos casos trocean allí mismo. Muy apañados. Cambia el entorno, pero no el menú.

0_excursio 8
El cubierto de la izqierda es un templo. El cubierto de la derecha es para hacer el picnic. Y al fondo, podeis ver a los profesores y niños cocinando. Y como estos cubiertos, había muchos más, dónde otra gente también celebrava.

0_excursio 9

Y cuando ya son las 4, y parece que es hora de volver a casa. Entonces en un santiamén, lo recogen todo y volvemos a subir al autobús para ir hacia el parque infantil. El conductor del autobús, que también se pensaba que ya volvíamos a casa, se queja diciendo que ya pasa de la hora que habían reservado el autobús. Pero a pesar de quejarse, sonríe y se dirige hacia el Puspalal Park.

Cuando llegamos al «parque infantil» entiendo por qué vamos tan tarde. No es más que un jardín, donde hay una «piscina enorme» que quizás fue construida como piscifactoría. Y que ahora hay una barca. Pagamos los tickets, y nos dan una vuelta por la piscina. Todo el mundo está muy contento. Parece que yo soy el único que lo ha encontrado un poco ridículo como parque infantil… pero lo disimulo y finalmente también me lo acabo pasando bien!

0_excursio 14

0_excursio 15